El apartheid es
el resultado de lo que fue un fenómeno de segregación racial en Sudáfrica.
Fue llamado así porque significa "separación" en afrikáans. Este
sistema consistía básicamente en la división de los diferentes grupos raciales
para promover el "desarrollo". Todo este movimiento estaba dirigido
por la raza blanca, que instauró todo tipo de leyes que cubrían, en
general, aspectos sociales. Se hacía una clasificación racial de acuerdo a la
apariencia, a la aceptación social o a la ascendencia.
I Biografía:
Al hablar de
esta “separación racial” el personaje más relevante es Nelson Mandela, pero quien
primero se involucra en un sistema revoluciones y resistencias para el
beneficio los ciudadanos negros del país es Albert Luthuli “la parte menos conocida de la lucha contra
el apartheid”
Albert John
Mvumbi Luthuli nació
en la colonia británica de Rhodesia
del Sur hacia el 1898 siendo el tercer hijo del misionero cristiano John Bunyan Lutuli y Mtonya
Gumede. A la muerte de su padre retornaron a su pueblo de origen en la provincia de Natal en Sudáfrica,
al lado de su tío Martin Luthuli, jefe de los cristianos zulúes de la zona, quien le enseñó las costumbres y
tradiciones locales.
Poco tiempo
después ingresó en una escuela de una misión cristiana, donde recibió su
primera educación. La influencia de este período de su formación sería fundamental
en los primeros años de su vida política, ya que se mostró un entusiasta
propagandista de los principios cristianos, especialmente de los morales.
Prosiguió sus estudios en la escuela de Edendale, cercana a la ciudad de
Pietermaritsburg. Completó su formación en el Adams College de Durban, donde
asistió a la escuela de magisterio. Tras graduarse se convirtió en profesor de
dicha institución, convirtiéndose en uno de los tres primeros profesores de
origen negro. Impartió clases de historia y literatura.
II Contexto histórico:
“Crece y se expande la discriminación racial”.
El racismo era efectivamente practicado en Sudáfrica durante siglos por los colonos blancos de origen holandés contra la población negra de este territorio, pero desde la instauración de la Colonia del Cabo en 1814 por Gran Bretaña, esta actitud racista comienza a ser no sólo una forma de vida, sino que los gobernantes instauran leyes que abalan y promueven la separación de razas.
El racismo era efectivamente practicado en Sudáfrica durante siglos por los colonos blancos de origen holandés contra la población negra de este territorio, pero desde la instauración de la Colonia del Cabo en 1814 por Gran Bretaña, esta actitud racista comienza a ser no sólo una forma de vida, sino que los gobernantes instauran leyes que abalan y promueven la separación de razas.
Albert Luthuli
contrajo matrimonio en 1927 con Nokukhanga Bhengu, profesora como él y nieta de
un jefe de clan. En 1933 recibió una delegación de zulúes de su aldea de
Groutville quienes le pidieron que sucediese a su tío, jefe de la aldea,
recientemente fallecido. Finalmente aceptó la proposición y en 1935 abandonó su
actividad docente para ponerse al frente de su aldea, que contaba con 5.000
habitantes. Desde su puesto como jefe de la aldea tomó conciencia de la
miserable situación en la que se encontraba la población negra, sumergida en el
hambre, la pobreza y la violencia política, ya que parte de las leyes
instauradas no permitían el desarrollo de la vida de los negros, humillando a
la raza de “color” a un trato indigno limitando las raciones alimenticias, desvalorizando
su trabajo con menos remuneraciones y prohibiendo su participación en actividades
de carácter social y político. Sin embargo, basándose en sus creencias
religiosas, Luthuli aconsejaba paciencia y resignación, promoviendo y generando
numerosas asociaciones culturales para la población negra.
Pero su
posición ante la situación social que vivía la población negra, cambió
radicalmente en 1946, tras presenciar una matanza de mineros negros que se
encontraban en huelga. Desde ese momento decidió implicarse en la política
activa. Por lo que se afilió al Congreso Nacional Africano (CNA), el principal
partido nacionalista de la población negra de Sudáfrica, con el que entró en
contacto gracias a su amistad con el líder del partido en la provincia de
Natal. Poco después fue elegido miembro del Consejo de Representantes del
partido en Natal. Nuevamente acudió a una nueva conferencia de Iglesias
cristianas misioneras que tuvo lugar en Estados Unidos, donde se destacó como
un brillante orador.
En sus
discursos afirmaba que la situación en África, de la población negra y la
discriminación racial, eran duras pruebas para los cristianos. Luego de su paso
por conferencias en Estados Unidos, regresa a Sudáfrica ya convertido en uno de
los dirigentes de color más prestigiosos del país, por lo que fue elegido
presidente del CNA en Natal. Sin embargo tuvo que contemplar como los
nacionalistas afrikaners se habían vuelto a hacer con el poder. En 1952 cuando
se puso en práctica la política de apartheid fue elegido presidente del
Congreso Nacional Africano. Desde este puesto político mostró una tenaz lucha
contra la segregación racial, con una campaña nacional denunciando las
injusticias que se estaban cometiendo, alzó su voz y dejó en claro su posición e
ideales, sin avergonzarse nunca de sus creencias y convicciones… "Estoy en el Congreso
precisamente porque soy cristiano. Mi creencia cristiana sobre la sociedad debe
encontrar su expresión aquí y ahora, y el Congreso es la punta de lanza de la
lucha real... Mi propia exhortación, porque soy cristiano, es entrar en el
meollo de la lucha con otros cristianos, tomando mi cristianismo conmigo y
orando para que pueda ser utilizado para influir para bien el carácter de la
resistencia"
III Aportes, Premio Nobel:
Luthuli
consideraba que la política de no violencia, al ser una técnica de presión no
revolucionaria, era más legítima y humana para un pueblo al que se le han
negado sus derechos.
Realizó una
radical oposición a la política de discriminación racial del gobierno de
Pretoria. Estaba convencido de la igualdad de derecho entre todos los hombres,
fuera cual fuese su raza. Creía que el problema negro se resolvía cuando la
población blanca, mediante la exhortación y la prédica, acabase por conceder
todos sus derechos a la población negra. Lanzó una campaña por todo el país
para denunciar las injusticias, por lo que 8.500 personas fueron voluntariamente
a prisión. Consiguió la dimisión del gobierno opresor, sin éstos al poder,
creció su reputación como figura de liderazgo.
Su actividad
política contraria al régimen racista de Pretoria hizo que fuera detenido en
numerosas ocasiones. En 1954 realizó un viaje por todo el país para conocer la
opinión directamente de la boca de la población negra. Al no poder el gobierno,
cambiar su postura a base de presiones y amenazas, fue acusado de alta traición
en 1956 junto a otros 155 activistas negros. Fue condenado, encarcelado y
desposeído de varios derechos civiles. La historia se repitió continuamente,
siendo encarcelado y liberado reiterativamente, mas la situación y sus convicciones
no cambiaron, jamás cesó su lucha por los derechos de su raza. Condenó
públicamente la matanza de Sharpeville, donde la policía sudafricana disparó
sobre una manifestación pacífica de la población negra. Había llamado
públicamente a la desobediencia civil, y el mismo quemó en público su
pasaporte.
Tras esta
acción el gobierno declaró ilegal el Congreso Nacional Africano y el Congreso
Pan Africano. Por su política de oposición al apartheid y por sus intentos de
lograr la integración racial se le concedió el Premio Nobel de la Paz en 1960,
con lo que se convirtió en el primer africano en conseguirlo. Las autoridades
sudafricanas le prohibieron acudir a Oslo para recoger el premio. La presión
internacional consiguió que este veto fuera levantado al año siguiente, de esta
forma Luthuli pudo recibir el premio de manos del rey noruego Olav V en
diciembre. Acudió a la ceremonia vestido a la forma tradicional sudafricana,
con un manto azul, un gorro de piel de leopardo con penacho de cola de mono. En
su discurso de agradecimiento afirmó que lo recibía como homenaje a la madre
África y a todos sus pueblos, sin distinción de raza, color o credo. A su
regresó le fueron recortada la libertad de movimientos y fue confinado en la
provincia de Natal, impidiéndole hablar en público.
A pesar de
ello continuó dirigiendo el Congreso Nacional Africano, pero más como un
referente moral que como líder político. Tuvo que ver como en el seno de la
formación surgían sectores contrarios a la no violencia, que tantas veces
Luthuli había defendido. Una facción del partido denominada La Lanza de la
Nación comenzó a atacar instalaciones del gobierno, por lo que la política de
la no violencia fue abandonada. En 1962 publicó su biografía titulada Let
My People Go (LIbertad para mi pueblo) en la cual hizo un resumen de su
lucha política y su ideario político. Murió en 1967 cuando fue atropellado por
un tren cuando atravesaba unas líneas férreas cercanas a su domicilio.
El apartheid
ha sido un tema de discusión e interés desde su puesta en marcha hasta hoy en
día en todo el mundo. Miles de personas, e incluso familias enteras
fallecieron, fueron humilladas y segregadas tan solo por su color de piel.
Dentro de las personas que sufrían la continua discriminación, hubo algunos que
levantaron su voz y se manifestaron en contra de la mala calidad de vida que
generó para ellos este sistema impuesto. Nelson Mandela es una de las
principales caras visibles de esta lucha, lo que muchos desconocen es que
Albert Luthuli aunque con su política de no violencia, logró varios de sus
objetivos contra esta lucha. Con la biografía de Luthuli podemos ver claramente
que hay ciertas situaciones en la vida de una persona que generan un cambio, en
su caso fue el lamentable escenario de presenciar la matanza de mineros negros,
esto fue lo que le mostró de manera gráfica lo mal que lo estaba pasando la
gente en Sudafrica y lo motivó a que buscara parar con esto. Toda su lucha fue
reconocida por el Comité Nobel del Parlamento Noruego,
cuando le otorgaron el Premio Nobel de la Paz.
La lucha
continua por los derechos humanos nunca llegará a su fin, siempre existirán
personas con conciencia social que serán portavoz de los más desvalidos. En
nuestra retina quedan grandes personajes que batieron y baten esta lucha, pero
hay cientos de ellos que comenzaron el camino y trazaron las bases para evitar
la segregación racial y otro tipo de discriminaciones terribles hacia los seres
humanos, la importancia de conocerlos es tanta como lo es continuar con su
lucha.
“La discriminación de los negros está presente en
cada momento de sus vidas para recordarles que la inferioridad es una mentira
que sólo acepta como verdadera la sociedad que los domina” (Martin
Luther King) La primera señal de división, separación y discriminación es la
ignorancia por la que traspasaron hace muchos años los líderes más poderosos
del mundo, enfocándose como primer aspecto en el color de la piel. Hoy en día a
pesar de la historia transcurrida sigue existiendo este tipo discriminación
tanto de raza, sexo, situación social o económica, pero así como encontramos la
poca tolerancia, también encontramos a seres dignos de imitar en la lucha por
la igualdad.
"Nadie nace odiando a otra persona por el
color de su piel, o su origen, o su religión. La gente tiene que aprender a
odiar, y si ellos pueden aprender a odiar, también se les puede enseñar a amar,
el amor llega más naturalmente al corazón humano que su contrario." Nelson
Mandela
Super que buena información, gracias
ResponderEliminarInteresante, muchas gracias por el aporte
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe ha servido mucho para la tarea, graciaxs
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